miércoles, 19 de febrero de 2020

Una de las canciones que menciona Carmen Martín Gaite en El cuarto de atrás: Tatuaje interpretada por Concha Piquer



"Este tipo de coplas formaban parte de la educación sentimental de las jóvenes de la época. Las protagonistas de la copla que en los años cuarenta conmovían a hombres y mujeres eran tan bellas como infelices, y, no por casualidad, habían perdido la honra, se movían en el mundo incierto y peligroso del espectáculo, eran "queridas" o "mantenidas" o habían desafiado a los hombres que las amaban.
La voz doliente de Conchita Piquer lanzaba desde las ondas de la radio, de modo subliminal, una advertencia sobre su aciago destino: la soledad, la desgracia y el abandono. [...]
Todas las protagonistas comparten el destino de la pecadora, que al vender su cuerpo renuncia al matrimonio, al verdadero amor y a la maternidad."

Extracto de Moral y vida cotidiana. Comportamiento y ocio en la posguerra por Lucía Prieto Borrego (Andalucía Historia abril 2019)